A Cu Canguro le gusta saltar con su cuerda favorita y jugar hasta ensuciarse las zapatillas. Pero un día, al intentar meterse nuevamente en la bolsa de su mamá, descubre que no puede entrar: ¡está ocupada!
Enojadísimo, muestra los dientes, patalea y sale en busca de una nueva bolsa: una que sea solo para él. Aunque muchos amigos intentan ayudarlo, Cu Canguro tiene que investigar y hallar la solución él solito
Autor: Gabriela Keselman|
Medidas:21cm x 24cm
Temas: Animales Celos Crecer Familia Hermanos Reflexionar